

En un momento de gran relevancia política y simbólica, Gran Bretaña y Francia están consolidando su relación en un contexto de posbrexit, marcando una nueva etapa de cooperación y entendimiento entre ambas naciones.
La visita de Estado del presidente Emmanuel Macron y su esposa Brigitte Macron, la primera dama, durante tres días en el Reino Unido, representa un paso importante en la redefinición de los lazos estratégicos tras la salida del país de la Unión Europea.
La llegada de Emmanuel y Brigitte Macron fue recibida con toda la pompa y solemnidad que caracteriza a las ceremonias oficiales en la monarquía británica.
El martes, en la base aérea de Northolt, en el noroeste de Londres, fueron recibidos por los príncipes de Gales, William y Kate, en un gesto afectuoso y protocolar.
Durante los tres días de estadía, la Casa de Windsor desplegó toda su majestuosidad para acoger a un líder con quien el rey Carlos III ha establecido un vínculo cercano y cordial. La visita no solo tiene un carácter diplomático, sino que también simboliza la voluntad de ambas naciones de fortalecer su cooperación en múltiples ámbitos. El rey Carlos III, en un gesto de hospitalidad, esperó a Emmanuel Macron en la puerta de Windsor, para acompañarlo en un recorrido por los jardines del palacio.
Posteriormente, ambos se subieron a carruajes victorianos para recorrer el pueblo, siguiendo el mismo camino que recorren las bodas reales y otros eventos históricos, en una escena que evoca la tradición y la continuidad de la monarquía británica.
La presencia de la monarquía en estos eventos refuerza la solemnidad y la importancia simbólica de la visita, que busca consolidar los lazos históricos y culturales entre ambos países.
Las primeras palabras de Macron al llegar al Reino Unido reflejaron la relevancia de la visita: “Llego al Reino Unido para una visita de Estado, seguida de una cumbre franco-británica. Un momento importante para nuestras dos naciones”, expresó. En sus declaraciones, Emmanuel Macron destacó que “el Reino Unido es un socio estratégico, un aliado, un amigo. Nuestro vínculo es de larga data, forjado por la historia y fortalecido por la confianza”. Además, subrayó que en esta visita se abordarán temas cruciales como seguridad, defensa, energía nuclear, espacio, innovación, inteligencia artificial, migración y cultura, con el objetivo de profundizar la cooperación de manera concreta, eficaz y duradera.
El presidente francés también abordó el aspecto estratégico, señalando que “este es también un momento significativo para nuestra Europa. La disposición expresada por el Reino Unido de fortalecer los lazos con la Unión Europea es una señal contundente, que celebro. Nos compromete colectivamente a explorar nuevas vías de cooperación que respeten nuestros intereses mutuos”.
Macron enfatizó que “hay mucho que podemos construir juntos: por la estabilidad de nuestro continente, por nuestra prosperidad y competitividad compartidas, y por la protección de nuestras democracias”. En este sentido, mencionó ejemplos concretos de colaboración, como los esfuerzos conjuntos para apoyar a Ucrania, donde la seguridad europea está en juego, así como proyectos industriales, cooperación espacial y trabajo militar conjunto, que demuestran la vitalidad y visión de futuro de la relación franco-británica.
Este viaje de Emmanuel Macron a Gran Bretaña es especialmente relevante porque constituye la primera visita de un líder europeo tras el Brexit, y la primera vez que un presidente francés recibe una visita de Estado en el Reino Unido durante su mandato.