El Día Mundial del Asma se celebra anualmente desde 1998 a partir de la primera “Reunión Mundial del Asma” efectuada en Barcelona, España.
La participación ha aumentado con cada celebración desde entonces y el día se ha convertido en uno de los acontecimientos de concientización del asma más importantes del mundo.
Su objetivo está centrado en mejorar el conocimiento de esta enfermedad y recabar la atención de la sociedad en general, optimizando los cuidados de los pacientes asmáticos de todas las edades.
Entre los principales objetivos del “Día Mundial del Asma” se encuentran:
Reducir los factores de riesgo que pueden desencadenar una crisis de asma.
Promocionar la enseñanza del manejo ante una crisis de asma.
Profundizar la relevancia de efectuar adecuadamente un tratamiento de prevención.
El asma es la enfermedad crónica más frecuente en los niños, es una causa frecuente de hospitalización en la población pediátrica siendo el primer motivo de ausentismo escolar por una enfermedad crónica.