Cada que llega septiembre, a los mexicanos les vienen dos cosas a la mente:
las fiestas patrias y sismos. No es para menos, ya que en el noveno mes del año se han registrado temblores de gran magnitud que han significado caída de edificios, perdidas de vida y demás desgracias.
Este miedo por el llamado “mes patrio” y los sismos aumenta cuando la fecha marca el 19 de septiembre, pues fuera de todo pronóstico aquel día se han registrado dos de los peores sismos que han azotado México. El mismo día, pero con 32 años de diferencia.
El primero ocurrió en 1985, un año antes del Mundial de México 86, el segundo que se realizaría en territorio azteca.
El movimiento telúrico de 8.1 de magnitud despertó al país a las 7:17 horas, dejando un saldo tan grande de muertos que no hay una cifra oficial confiable.
El calculó señala que hubo alrededor de 10 mil víctimas fatales.
El segundo terremoto llegó en 2017, un año antes de las elecciones presidenciales de 2018. El sismo de 7.1 de magnitud tomó desprevenido al país a las 13:14 horas, poco después del simulacro en recuerdo del temblor de 32 años atrás.
Si bien el sismo de 1985 fue de 8.1 de magnitud, el epicentro fue muy lejano y bajo las costas de Michoacán, a más de 400 kilómetros de la capital.
Por su parte, el temblor de 2017, con una magnitud de 7.1, tuvo como epicentro a Morelos, apenas 120 kilómetros al sur de la Ciudad de México.