Lamentable que corten las aspiraciones a Samuel García, solo demuestra que PAN tiene grandes intereses.
Samuel asegura que pudo haber nombrado a Javier Navarro como gobernador interino del estado de Nuevo León, pero no lo hizo porque eso era ceder sus principios, ya que recibió presión por parte del PRIAN para continuar con su mala política donde el robo y la impunidad reinan, asegurando que los que presidente de PAN y PRI, Marko Cortes y Alejandro «Alito» Moreno, respectivamente, entorpecieran cualquier acuerdo con tal de que renunciara a la posibilidad de ir a la contienda como presidente.
Dada la situación, Samuel García habría acudido a la suprema corte, al tribunal electoral del poder judicial de la federación, a muchos juzgados de distrito, asegurando que la máxima estancia le cerro toda posibilidad, por lo que decidió regresar a tomar el cargo de gobernador a Nuevo León.