“SIGUE DOLIENDO LA DESAPARICIÓN DE LOS 43 ESTUDIANTES DE AYOTZINAPA”

Hace unos días se cumplió una década desde la desaparición de los 43 estudiantes de la normal rural Isidro Burgos, de Ayotzinapa, cuando los jóvenes intentaban trasladarse en cinco autobuses desde la ciudad de Iguala hacia la capital del país para la conmemoración de otra masacre estudiantil, la del 2 de octubre 1968 en la plaza de Tlatelolco, cuando fueron atacaron a balazos. Una década después de aquellos terribles sucesos en el gobierno de Peña Nieto, todo lo que se ha recuperado de los 43 jóvenes desaparecidos, han sido tres trozos de huesos de tres de ellos. Para recordar aquel terrible acontecimiento el país llevó a cabo masivas protestas por la masacre y el curso en el que ha derivado la investigación. “A diez años de la desaparición forzada de los 43 normalistas, el diálogo es clave para avanzar en una búsqueda e investigación efectivas. La verdad y la justicia aún aguardan por materializarse”. “La marcha es por la verdad y la justicia, la búsqueda efectiva, la memoria activa y la reparación integral. Hasta Encontrarles”. Los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa han hecho un repaso de los 10 años desde que sus hijos fueron desaparecidos por grupos criminales y fuerzas de seguridad coludidas, desde un templete en el Zócalo de Ciudad de México. Arropados de algunos manifestantes, los familiares agradecieron a los colectivos e instituciones que les han acompañado en esta década en la búsqueda de saber lo que sucedió la noche del 26 de septiembre de 2014, en Guerrero. Desafortunadamente la promesa de AMLO de solucionar ese problema quedo inconclusa, y por ello los padres y familiares de los normalistas han señalado: «AMLO, dónde quedó tu promesa», han puesto algunos de los manifestantes en los muros con los que han cortado las calles hacia el Zócalo capitalino. Estos grandes bloques de concreto han sido instalados en los alrededores de la principal plaza del país, desde las primeras horas de este jueves, para evitar el paso de la manifestación.