El Día Mundial del Refugiado se celebra el 20 de junio, con el objetivo de visibilizar, y ayudar a millones de personas que viven en condición de refugiados, desplazados y a la espera de asilo en otros países debido a los conflictos armados, de violencia y persecución de los cuales son objeto en sus países de origen.
Esta efeméride comenzó a celebrarse en el año 2001, en conmemoración del 50 aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951.
Fue en 1959 cuando la Asamblea General de Naciones Unidas proclamó el Año Mundial de los Refugiados, a iniciativa de Reino Unido.