Ángela Peralta
Ángela Peralta, conocida como ‘El Ruiseñor Mexicano’, la cantante mexicana nació el 6 de julio de 1845. Fue la soprano del Siglo 19 que adquirió fama mundial.
Pese a ser hija de padres indígenas y de humilde cuna, pudo dedicarse a una profesión que estaba destinada a las señoritas de las clases económicas más favorecidas de su tiempo.
Con disciplina y gran fuerza de carácter venció los prejuicios de la época y abrió las puertas de ese arte a muchas otras mujeres que la seguirían.
La cantante mexicana inició su desde temprana edad, pues solo contaba con 8 ocho años de edad cuando interpretó Belisario, de Gaetano Donizetti. Cursó estudios en el Conservatorio Nacional y a los 15 años debutó en el Teatro Nacional en el papel de Leonora en Il trovatore, de Giuseppe Verdi.
Su debut formal en la escena de la ópera tuvo lugar a los 15 años, actuando en el Gran Teatro Nacional, la principal casa de ópera de la Ciudad de México y del país. Tras el éxito de esta actuación, Ángela Peralta y su padre se trasladaron a Italia para que ella pudiera estudiar ópera. Allí, se le dio la oportunidad de actuar para una audiencia que incluía al rey Víctor Manuel II de Italia.
Ángela Peralta se presentó en una gran cantidad de lugares, entre ellos Turín, Génova, Nápoles, Roma, Florencia, Bolonia, Lisboa, París, Barcelona, Madrid, El Cairo, Alejandría, San Petersburgo, Nueva York, La Habana y varias ciudades mexicanas.
1 de julio “Día del Ingeniero”
La celebración del Día del Ingeniero en México surgió en 29 de octubre de 1973 cuando el entonces Secretario de Comunicaciones y Transportes, Eugenio Méndez Docurro, le propuso al Presidente de la República, Luis Echeverría Álvarez, establecer el 1 de julio como Día Nacional del Ingeniero.
Se propuso que fuera el 1 de julio debido a que, en esta fecha, pero de 1776, se expidió la Real Cédula para la creación del Real Tribunal de Minería en México, que dio origen a la fundación del centro de docencia e investigación llamado Real Seminario de Minería, donde tuvieron lugar los primeros planes de estudio y textos para las primeras escuelas de ingeniería en América.
La palabra ingeniero ya era utilizada en Europa desde el Renacimiento. En México, la primera Asociación de Ingenieros surgió en 1867, aunque la primera que comenzó a funcionar de manera formal data de 1886.