
San Pedro Garza García, NL. – Lo buscaban desde hace cinco años por estafar más de 2 millones de euros en España.
Conducía Ferraris, pedía matrimonio en helicóptero y organizaba fiestas con mariachis en lujosos apartamentos.
Pero esta semana, Raúl Batres fue arrestado a la salida de un restaurante en San Pedro Garza García, el municipio más rico de Latinoamérica.
A pesar de ser perseguido por la Interpol, Batres, de 36 años, vivía tranquilamente en un fraccionamiento privado en Nuevo León.
Había montado cuatro empresas entre México y Estados Unidos y nunca cambió su identidad. Su estilo de vida opulento contrastaba con su historial: 59 personas lo denunciaron por haberles robado entre 3.000 y 400.000 euros a través de una supuesta academia de inversiones llamada BCN Training Academy, en Barcelona.
Se presentaba como un experto en trading con diez años de experiencia y ofrecía rendimientos mensuales del 8%. Durante un tiempo, cumplió con lo prometido, lo que le permitió ganar confianza.
Sin embargo, como en toda estafa piramidal, el dinero dejó de llegar a mediados de 2020. Ese mismo año huyó con su prometida, la armenia Tatevik Aroyan, y desapareció.
En 2023, se pensó que había sido detenido en México, pero logró esfumarse nuevamente.
No fue hasta este 16 de abril que fue finalmente capturado. Las víctimas, representadas por el abogado José María Fuster-Fabra, esperan que ahora sí se concrete la extradición del mexicano que protagonizó uno de los fraudes financieros más sonados en España.