Cerca de cumplirse un año de la invasión de Rusia a Ucrania, en la que cientos de personas han perdido la vida, asimismo, esta guerra ha traído consecuencias a nivel mundial, principalmente ha dejado a aproximadamente más de millón y medio de personas afectadas con el suministro de alimentos y fertilizante, la economía de países a nivel internacional igualmente se ha afectado tras el impacto negativo de este conflicto.
Derivado de ello Ucrania ha insistido en más de una ocasión en dejar fuera de los juegos olímpicos de París 2024 a atletas rusos y bielorrusos.
La comisión de Deportes del Parlamento ucraniano, afirmó en días pasados que la propaganda rusa y bielorrusa intenta “filtrarse en las competiciones internacionales” y que la mera aparición de atletas rusos y bielorrusos en el deporte de elite sería una señal de que la comunidad internacional está “aceptando” gradualmente la agresión rusa contra Ucrania.
Volodímir Zelenski en uno de sus discursos nocturnos señalo: «El movimiento olímpico y el deporte internacional en general deben ser protegidos de los habituales intentos rusos de politizar el deporte”. «La politización rusa del deporte significará inevitablemente la justificación del terror. Esto no debe permitirse».